martes, 3 de noviembre de 2015

Ocho años después.

     Aquella tarde, bajo un Sol apacible, y rodeados de curiosos, esas cuatro palabras resonaban en mis oídos tranquilamente. Cuatro palabras y un abrazo, nada más, fueron suficientes para que la inocencia del amor infantil naciera y se esfumara al día siguiente. "¿Quieres ser mi novio?", había dicho ella como un zarpazo; "Sí", y no dijimos más. 
     Y realmente no dijimos más, al menos durante los años posteriores. 
     Han pasado ocho años desde aquél encuentro en el parque deportivo del pueblo.
     Han pasado ocho años, y nunca, nunca, nunca, pude probar sus labios. Labios que, ocho años después, ya no lucen tiernos y coquetos, sino fogosos y lascivos, seductores y exquisitos.
     Han pasado ocho años, y nunca, nunca, nunca, puede observar sus ojos. Ojos que, ocho años después, no son más ingenuidad ni pureza, sino perdición, aeroplanos que te elevan a lo desconocido y el café que acompaña tus desvelos. Ojos que, seguro estoy, han sido culpables de que, uno que otro cuerdo perdiera la razón, y de que algunos tontos te entregaran el corazón.
     Han pasado ocho años, y nunca, nunca, nunca, pude sentir su respiración. Ni sus caricias. Ni sus besos. 
     Ninguna utopía puede ser comparada con estos pedacitos de sueños que aún respiran y subsisten en mis deseos. Ninguna mujer, puede ser comparada con la que ahora, con su figura delgada y piel fina, se empeña en vivir en mis pensamientos. 
     Han pasado ocho años, y sin embargo, estoy anclado a ti como cuando te conocí a los cinco; o cuando nos escribíamos cartas; o cuando jugábamos a "las escondidas". 
     A ocho años de sequía;
     A ocho años de ilusiones;
     A ocho años de esperanza;
     Ocho años después me pregunto, ¿aquella tarde fue real?


4 comentarios:

  1. El amor platónico, ese que atormenta al corazón y le deja siempre enamorado, muy bonito poema me gusto mucho

    ResponderEliminar
  2. Ocho años después enamorado de la misma chica. :) Muy bonito. ;)

    ResponderEliminar